Media maratón de Coslada

El día de la carrera se levantó nevando y, como es lógico, con un frío que pelaba. A pesar de lo adverso de la meteorología me calcé las zapas y acudí a la cita (más que nada pq. me había comprometido a competir en el campeonato de Madrid de clubs, competición paralela a la misma media, y tenía que dar el dorsal a un compañero).

Llegado el momento de elegir la indumentaria me vi en la obligación de correr con mallas y con camiseta larga. Menos mal que antes de salir de casa me había asomado por la ventana y tuve la prudencia de coger estas prendas que tan bien me vinieron para la carrera.

La carrera en sí se desarrolló por los cauces lógicos. Poca gente (esta media de por sí atrae a poco más de 500 ó 600 corredores. Y alguno menos acudiría por el tiempo. Una vez se dió la salida cogí un ritmo exigente desde el primer momento. Las sensaciones durante toda la carrera fueron más las de un 10.000 que las de una media. Es decir, el ir durante toda la carrera al límite. En cualquier caso aguanté más o menos bien (a pesar del frío y en las últimas cuatro semanas, desde que hice el maratón de Sevilla, no había hecho más de 14 kms.).

Y poco más. Coslada es una media para hacer en buen momento de forma, ya que las cuestas que tiene pueden hacer mucho daño. Menos mal que el background de los tres meses de preparación del maratón todavía estaba ahí y pude usarlo.

Ni que decir tiene que sólo pude apretar en el último km. El tiempo: 1.21.19, 4'' más que el año pasado. Eso sí: suelo mojado, nieve y muuuuuuuuuucho frio.