La verdad es que no tenía ni una sóla gana de correr. Mientras esperaba que llegara la hora del calentamiento, sentado viendo las pruebas de velocidad, vallas, etc. tenía el 'agobio' este que me da pensar en la paliza que me espera. Sobre todo después de apuntarme. Había puesto la marca que puso Rafa: 2.02, cuando unos minutos antes comentaba con Pino mientras nos cambiábamos que hacer 2.08 ya estaría bien.
Ya en el previo a la carrera me tocó la 5ª serie (o es que la gente corre mucho o es que mienten como bellacos, pensé). Si con 2.02 te colocan en la 5ª de 8 series, que alguien me lo explique.
Cuando llegó el momento de la salida me dieron un par de bostezos mientras esperaba. Pino me comentaba desde fuera algo en plan: pero tron, déjate de bostezar, que vas a correr un 800 :-)
Salí por la calle 6. Rafa iba por la 7. En cuanto pasamos la curva cogimos calle libre. Enseguida me quedé en la parte de atrás del grupo. Joder, como corren, pense. Es que no puedo seguir su cadencia.
Aguanté +/- hasta el 400 (Mora me cantó el paso en 1.01-1.02). Aquí uno me adelantó por dentro (me tocó) y ya me quedé el último. Entre el 400 y el 600 me abrieron unos metros que ya no conseguí recortar. En los últimos 200 pude acelerar un poco. Oí al mister que me decía no se qué tiempo, y que no parara hasta pasada la meta, cosa que hice.
Cuando llegué Mora me había tomado 2.07-2.06. En principio el objetivo estaba cumplido. Pero cuando dieron los tiempos oficiales, cuál sería mi sorpresa: 2.06.91. Una buena marca, más a estas alturas de temporada, cuando llevo desde abril dándole a la pista. ¿El puesto? Pues vuelta a los orígenes: último :-)
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