Cuando uno tiene un día libre y se lo propone el tiempo le cunde de lo lindo. Hoy es el día de San Isidro y, por tanto, festivo en Madrid capital. Ayer a la salida del trabajo me marqué un entrenamiento de calidad: una vuelta al parque de Arcentales en tiempo record: 11.59.
Hoy me he levantado prontito y me he dado una vuelta por el barrio para terminar con unos kilómetros en compañía de la tropa del Edwards con felicitación a Luis por sus 2.49 en Vitoria incluída.
Luego unas compras en San Sebastian de los Reyes aprovechando que allí si que abrian. No se ha podido comprar todo lo que se quería pero al menos lo principal sí.
La guinda al pastel en lo deportivo han sido unas canastas con Miguel en las canchas de abajo. Aquí, además de un 21 con el peque nos hemos marcado unos tiritos y a mi hoy me ha dado por enchufar triples, fundamentalmente desde la zona de los carros 2, 3 y 4. Se notaban tanto los kilómetros de esta mañana como los 3.5 de ayer con el corazón saliéndose por la boca, porque cuando había que apretar un poco para ir a por el balón las piernas decían que corriera su tía.
En fin, que mañana me haré algo de volumen (quería llegar a los 16 km) y el sábado, que tengo comuñon, descansaré.
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