Automotivacion

Estamos a media semana, jueves, y la buena noticia es que siendo el cuarto día de la semana llevo 4 días de entrenamiento de los cuales dos lo han sido de calidad: martes unos ejercicios de fuerza (gimnasia) en el polideportivo de Palomeras y jueves un par de miles en las pistas del Canal más la ida y vuelta desde el polideportivo el Triángulo de oro.

Los otros dos días han sido variados. El lunes metí algo más de 12 km. volviendo a casa desde el trabajo. Lo mejor es que esos 12 km. hubieran sido impensables hace sólo 2 ó 3 semanas y que si la cosa sigue bien en la acumulación de kilómetros, la docena se quedará corta. El otro día, el miércoles, fue un regenerativo en toda regla pues tenía las piernas como Rambo.

Y fue el miércoles el primer día en que tuve que hacer uso de todo tipo de motivación para salir a entrenar. Desde el "la experiencia te dice que aunque ahora te duelan las piernas, cuando hayas terminado te dolerán bastante menos" o "venga, que el último de Ken Follett, El invierno del mundo, está genial, pero hay tiempo para leer y también lo hay para hacer deporte"... El caso es que funcionó y sí salí a entrenar.

El jueves el entrenamiento ha sido a la hora de comer. Quería hacer un par de miles. El primero no ha costado más de lo normal, pero en el segundo ya he tenido que luchar contra las piernas y la cabeza para no echar pie a tierra. En esta ocasión he usado el, "una vuelta a la pista cuando todavía me quedaban 400 m. del segundo mil". Al final han caído los 1.000 m. y el primero y el segundo los he clavado.

En fin, de momento funciona, así que seguiré usándolo.