lunes, 8 de junio de 2009

Como Cocodrilo Dundee

Imagino que recordáis la escena de la peli en la que Cocodrilo Dundee está en Nueva York, se asoma de un taxi y saluda a uno que pasaba por allí, así, a las bravas, sin conocerlo de nada. Claro, el otro flipa y no es de extrañar que piense algo así como ¡Tronco, que esto es Nueva York! Aquí no se va saludando a la gente por la calle.

Pues algo parecido me pasa a veces cuando voy corriendo, me voy cruzando con la gente que también va corriendo y te saludan. No sé, pero me parece curioso. ¿Por qué lo hacen? ¿Por qué te ven como a un igual? ¿Se sienten en la obligación de saludar a un colega, a un compañero de fatigas? ¿Alguna otra razón?

En mi caso sólo saludo a los que conozco y, claro, éstos sólo me los cruzo en el parque. Si coincidimos varias vueltas con un único saludo creo que es suficiente (bastante tiene uno con ir corriendo como para encima estar saludando a la gente). También es verdad que hay veces en las que voy a lo mío y no veo a nadie y otras que voy con la lengua fuera y sin aliento para decir ni hola.

En cualquier caso creo que yo hubiera sido como el ciudadano al que saludó Cocodrilo Dundee (Mike Dundee, de Australia) y me hubiera sorprendido igual si se me diera el mismo caso

7 comentarios:

Macario dijo...

Corriendo, en bici, en moto y en montaña, en condiciones de "no saturación", se saluda. Me parece una buena costumbre.

Tú es que eres un desaborío ;-))))

Miguel dijo...

Asocial :-)))

Yo suelo saludar. Depende de las circunstancias, claro. Si te pones a rodar en el Inef, con todo petao de gente, pues no. Pero si los encuentros son ocasionales, como dice Macario, saludo. Bien con un movimiento de mano, bien con un "¿Qué hay?", o un "Aamooos". En la bici, igual.

En mi caso es a medias un sentimiento de identificación con la actividad de esa persona, y una necesidad compulsiva de saludar a la gente con la que me cruzo. Llámame raro, pero me cuesta no saludar a la gente con quien me cruzo por la mañana según voy de camino al autobús, aunque sea a las siete de la mañana. No lo hago porque creo que se pensarían que estoy loco, pero me parece agradable. Es más, creo que si nos saludásemos más a menudo (tampoco hace falta pararse a preguntar por la familia y los críos), ya sea corriendo o en la vida cotidiana, se reflejaría en nuestro ánimo.

jota dijo...

Pues a mi tambien me gusta saludar y yo lo hago copiando a los moteros que se dan rafagas ,no se me parece bien un simple gesto con la mano , sere otro raro.

Dragonkik55 dijo...

desagradable¡¡¡

yo desde mi época de ciclista, tengo esa manía-costumbre que es saludar, aunque sea un leve gesto de la cabeza, la mano, o si voy rodando incluso un hola.

Creo que es un gesto de conplicidad y que es bonito mantenerlo

Quique dijo...

Hola Vicente, yo soy de los que saluda a todo corredor que se cruza en mi camino, creo que lo hago por que compartimos una afición bonita y los 2 estamos allí sin que nadie nos obligue..que ya es.

Un saludo
Quique

vsblanco dijo...

Pues si que voy a ser algo asocial, si.

No sé, tendré que replanteármelo.

Guille dijo...

jeje, a mi también me gusta saludar, seguramente sea por solidarizarme en el esfuerzo del otro, como un apoyo moral.