domingo, 28 de febrero de 2010

Termina febrero, un mal mes...


... en lo del correl, que es el tema principal de este blog. En todo lo demás las cosas van bastante bien, y que siga así.

Tras varias semanas luchando contra la fascitis creo que empiezo a ver algo de luz al final de un lejano tunel. El pie no está bien del todo, pero ya me deja correr. Este fin de semana me he atrevido a salir dos días y la cosa ha salido bastante bien. Es verdad que no han sido muchos kilómetros (en ninguno de los casos he superado los 10) pero el que haya podido completarlos ya me hace ver las cosas más claras.

Por concluir os resumo lo que ha sido el mes de febrero en cuanto a números.
  • 12 días de reposo
  • 7 días de gimnasio
  • 9 días de carrera
  • 82 km.
Espero que el mes de marzo os pueda decir que ya me he recuperado.

jueves, 25 de febrero de 2010

No sé si envidiarles

Estamos en las últimas semanas del invierno más "invierno" que recuerdo. Mi madre me comenta que antes eran todos así, pero yo no había vivido ninguno con tanta lluvia, nieve y frío. También es verdad que estuvimos hasta finales de noviembre con unas temperaturas buenísimas que nos permitían salir a entrenar en manga corta.

El caso es que después del invierno viene la primavera y esta estación es pródiga en maratones. Casi todos los que corremos esta distancia nos marcamos uno para los meses de marzo o abril. Es verdad que en el caso de España hay maratones como los de Sevilla o Valencia que se corren en febrero

Pero no es menos cierto que los más multitudinarios están por llegar, Barcelona y, sobre todo, Madrid. Esto sin contar todos aquellos que se aventuran en maratones de Europa (conozco gente que se va a Rotterdam, Londres...) Todos en primavera o últimas semanas del invierno.

Y todo el que quiere hacer uno de estos maratones está ahora metido en harina, todos metiendo más kilómetros que la burra de Marco, que si series, que si controlados, que si tiradas de 2 h. y veintitantos kilómetros.

A mi este año me ha tocado ver los toros desde la barrera. Llevo prácticamente todo el mes de febrero sin poder entrenar en condiciones y cuando pueda volver a hacerlo tendré que empezar casi de cero ya que tanto tiempo de inactividad se nota.

Pero sigo los entrenamientos de mis conocidos, todos los que están preparándose uno u otro maratón, y siento por un lado envidia sana de que pueden entrenar con normalidad, pero por otro lado casi les compadezco por el clima que están sufriendo. Porque salir a entrenar es algo que gusta, pero volver todos los días calado como una sopa no sé si tanto. El caso es que hay que hacerlo y en la mayoría de los casos se hace con gusto, ¿no?

Espero que el tiempo os acompañe el día que os toque correr. Hasta entonces toca soportar la que se nos está viniendo encima.

lunes, 22 de febrero de 2010

Regreso prudente

Hoy me he calzado las zapas después de 1 semana sin correr ni para coger el metro, y me he hecho unos kilómetros escuchando lo que me decía el pie.

Y lo que me ha dicho es que me va a dejar correr pero que todavía duele un poquito. Así que la primera reacción ha sido un poco de enfado. Pero según han ido pasando los kilómetros que he hecho he podido comprobar que el dolor es bastante llevadero y, aunque no ha sido mucho lo que he corrido, me ha dado la sensación de que con los kilómetros el pie se calienta y se puede correr. De hecho el dolor es bastante similiar al de otras veces que he tenido fascitis.

Así que espero que no tenga que parar más tiempo. Durante esta semana iré metiendo más kilómetros de manera paulatina y si el pie aguanta bien a partir de la siguiente me empezaré a plantear algún objetivo y aplicaré un plan de entrenamiento.

jueves, 18 de febrero de 2010

Semana de pasión

No sé que es peor, entrenar duro o no poder hacerlo cuando y como uno quiere. Lo primero te tiene todo el día sin fuerzas, va uno de la cama al sofá y estar de pie se hace casi una tortura. Pero con lo segundo la tortura es de coco, el no poder hacer eso que tanto nos gusta hace que uno no sea él mismo y como no te lo tomes con paciencia y te mentalices bien hasta puedes estar de muy mal humor.

Lo único que deseo es que después de esta segunda semana de parón la cosa vuelva a su normalidad. El pie parece que sigue doliendo, pero todavía quedan varios días hasta que vuelva a calzarme las zapas. Mientras tanto doble sesión de GYM esta semana y mañana haré una incursión en el mundo de la elíptica (por eso de hacer algo aeróbico, que ya está bien de tanto levantar peso).

Así que en esas ando. Espero que la próxima que os cuente sea una entrada más alegre en la que os diga cuánto se nota estar una semana sin correr y que el pie no ha molestado. Pero, quieto, que ya estás soñando despierto.

martes, 16 de febrero de 2010

No hay presupuesto

Estos días con tanta visita al GYM me podido comprobar en qué estado están algunas de las máquinas de los polideportivos municipales.En el pdvo. al que suelo acudir hay un buen número de cintas o tapices para correr. Pero la gran mayoría están estropeadas. Y el problema es que al parecer no hay presupuesto para su mantenimiento. Esto es lo que me dijo el operario cuando le pregunté.

Y no sé si se trata de un recorte en mantenimiento o afecta a otras áreas. Ha habido días en que en las duchas de algunos vestuarios no había agua caliente, hay veces que en la sala de musculación no hay nadie (no digo ya que sea monitor, simplemente alguien). En fins, que parece que el ayuntamiento ha tenido que rebajar los presupuestos, no sé si por la crisis o por la deuda.

Lo que sí tengo claro es que cuando vuelva a tener el pie operativo, tendré que buscarme otra alternativa para correr porque pillar una cinta libre es cosa menos que imposible.

lunes, 15 de febrero de 2010

Adidas Top Ten

 
Éstas que véis en la foto son las zapas de básquet que le acabo de comprar al chaval.
Seguro que más de uno las ha reconocido, unas Adidas Top Ten como las que se llevaban en los 80. De hecho yo tuve unas. Pues bien, no es que las hayamos tenido que reciclar por esto de la crisis, no, es que las acaban de reeditar (o como se diga hablando de moda).

En fin, curiosidades no atléticas. Y es que en lo de nuestro deporte poco tengo que contar como bien sabéis.

sábado, 13 de febrero de 2010

Una semana no ha sido suficiente

Para los que me leéis con frecuencia el título es lo suficientemente explicativo. Para los demás, comentar que ando con unas molestias en la planta del pie izquierdo a la altura del talón. Imagino que será una fascitis. El caso es que no me permite correr ni medio en condiciones.

Así que decidí parar una semana, darme hielo y automasajes y parecía que la cosa iba a mejor, pero ayer, cuando me volví a calzar las zapas para hacerme unos kilómetros pude comprobar que la cosa seguía doliendo. A pesar de todo seguí pensando que en cuanto se calentara el dolor se iría. Pero de eso nada, terminé bastante dolorido y hoy cuando me he levantado cojeaba bastante.

Así que no queda más remedio que seguir en paro hasta que esto se cure. Seguiré con mis días de gimnasio pero meteré un tercer día más de algo aeróbico, posíblemente elíptica. Espero que el paro no dure mucho más.

Regalo perrito



Cruce de Husky con perro de caza.
Son de gratix (p'a eso los regalo)

jueves, 11 de febrero de 2010

Como robocop

Después de una semana sin correr a base de sesiones de GYM me siento como Robocop de tanto kilo que he levantado. Y eso que sólo han sido tres sesiones y, creo, que no me he metido mucha caña. He hecho abdominales, he trabajado algo el tren superior y, como siempre, he fortalecido el tren inferior.

Mañana vuelvo al ruedo. Mañana me calzo las zapas y saldré a hacerme unos kilómetros. El dolor en el pie ya casi ha desaparecido y creo que ya está en condiciones de aguantar el esfuerzo de la carrera.

Y a mi me apetece ya volver a los ruedos, que el gimnasio está bien como sustituto, pero donde esté el parque donde hacer kilómetros y kilómetros que se quité cualquier otro sucedáneo.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Los pies, la base de todo

 
No sé si habéis tenido problemas en los pies y si recordáis las sensaciones que tiene uno cuando los tiene tocados por una u otra razón. Por desgracia yo soy de los que con bastante frecuencia tengo algo en alguno de los pies. Mi manera de pisar cuando corro, de metatarso y supinando algo, y las distancias en las que me muevo, hacen que suela tener bastantes problemas en estas extremidades.

Y el último problema ha sido un fuerte dolor en la planta a la altura del talón, en el pie izquierdo. Me vino después de correr el cross de San Sebastián de los Reyes, 10 kms. y pico con los clavos. Lo más probable es que se trate de una fascitis aunque leve. El caso es que me ha obligado a parar durante una semana, más por precaución que otra cosa, pero parado al fin y al cabo.

El caso es que sólo cuando uno ve que tiene problemas en algún sitio es cuando llega a comprender la importancia que tiene en el todo que es el organismo. En el caso de los pies estamos hablando de la base. Estar fastidiado de uno de ellos hace que uno vaya por la calle como pisando tierras blandas, tropezándose con todo, como sin tacto, sin seguridad. En suma, sin una base sólida.

Y estoy hablando del día a día, de la vida cotidiana. No hace falta recordar cuánto cuentan unos buenos pies en esto del correl.

martes, 9 de febrero de 2010

lunes, 8 de febrero de 2010

Mi gafe con los campeonatos de veteranos

Pues sí, parece que esoty gafado con estas competiciones. Las últimas veces que he querido hacer alguna prueba en pista he tenido algún percance.

Haciendo un repaso rápido me selen:
Campeonato de verano de 2.008. Majadahonda, carrera de 1.500. En el primer 100 contactura en el isquio y a casita.
Campeonato de invierno de 2.009. Majadahonda. Llego a correr el 3.000, una nevada hace que se suspendan las pruebas.
Campeonato de invierno de 2.010 (este año). Un cross una semana antes me deja el pier izdo. tocado y por prudencia prefiero no participar.

Total, que todavía no he debutado en un campeonato de veteranos en pista. Ya le voy teniendo ganas.

sábado, 6 de febrero de 2010

¿Uno solo es suficiente?

Pasión y dudas como padre, admiración de entrenador o la objetividad de los números. Hoy me voy a salir del deporte que debería ser rey (el atletismo) y voy a hablar de baloncesto. Liga escolar, categoría alevín (todavía en canastas de minibasket)partido del sábado por la mañana, Aula nueva contra Santo Domingo el Savio. Tanteo final, 41-50. 

Empiezo por el final, por los datos puramente objetivos. Anotadores de Santo Domingo el Savio (Dosa). Miguel 43 puntos, David 7 puntos. ¿Se basta un jugador para ganar al otro equipo? Cuando hablamos de deportes de equipo, en este caso baloncesto, tenemos claro que el equipo son 5 jugadores y que si se gana, gana el equipo y si se pierde lo hace el equipo. ¿Qué pasa en un equipo cuando un solo jugador mete más puntos que todo el equipo contrario junto?

Sigo como entrenador. Este es el momento en que os cuento que los viernes por la tarde entreno a los chavales del Dosa en baloncesto. La filosofía del entrenamiento es algo así como "de apoyo". Cuando le comenté al responsable de deportes del colegio que quería entrenarles les dije que lo que quería hacer era trabajar con los chavales los conceptos. El entrenamiento lo titulé, "técnica individual, conceptos y fundamentos".

Se trata de trabajar con los chavales todas estas cosas que os he comentado que para el caso de baloncesto son cosas como pase, bote, tiro, entradas a canasta, etc. Como entrenador es gratificante ver como chavales que casi no saben ni botar el batón van aprendiendo su manejo, como cuando hacen una entrada marca en 1-2 de las entradas (primer paso con la pierna derecha, largo, para buscar la canasta, segundo paso con la izquiera, corto, para buscar un salto más alto).

Pero me encuentro con que uno de los chavales destaca muy por encima de los demás. Primera solución. Cuando hacemos entradas, guante en la mano derecha y a trabajar la mano débil, la izquierda. Si ya tiene interiorizados de sobra los movimientos que el resto está aprendiendo, que trabaje la "mano tonta". ¡Papá, hoy he metido una entrada con la izda!, me decía. Respuesta mía: "¿ves para qué sirve lo que entrenamos".

Por último, mi papel como padre. Por todo lo que he comentado creo que el chaval está preparado para jugar en equipos con más nivel. De hecho creo que su progresión como baloncestista podría ser más rápida de hacerlo con compañeros que mostraran su mismo nivel.

Pero también es verdad que estamos hablando de un niño de 11 años y como padre creo que a esta edad lo primero es divertirse, estar con sus amigos y compartir con ellos el entrenamiento. Son niños y lo que debe de prevalecer es el juego. Ya habrá tiempo de tomarse esto con un poco más de seriedad.

De momento ya ha probado en el campus de verano del Real Madrid y en el de Navidad del Estudiantes. Lo primero que me dijo cuando terminó el de verano fue: "papá, hay que ahorrar para el año que viene, quiero volver". ¡Y vaya si hay que ahorrar! 600 leuros, pero pagados muy a gusto. Quizás en unos meses os vuelva a contar otra chapa sobre esto del básket, como ya os conté hace unos meses: http://www.vsblanco.com/2009/02/partidazo.html.

Y por concluir, como decís alguno de los que me leéis, si habéis llegado hasta aquí, deciros que el pinrel está no bien y que voy a descansar de correl unos días hasta que desaparezcan el dolor en el calcañar.

viernes, 5 de febrero de 2010

Hielito p'al pinrel

 
Dado que el dolor persiste, que salir a rodar (no hablo ya de series o de ritmos controlados) es un auténtico suplicio y que eso no va a menos he recurrido al hielito.

Casi descartado que vaya a correr el domingo. Al menos podré tener un buen saturday night fever y/o tomar vermute el domingo ;-)

jueves, 4 de febrero de 2010

Secuelas

Estamos a jueves (si, mañana es San Viernes), hace ya 4 días que corrí el campeonato de Madrid de cross, y todavía arrastro las secuelas de la carrera. No en vano fueron algo más de 10 km de un circuito duro, si bien el terreno no estaba pesado (y eso que llevamos un año en el que está lloviendo más que mucho).

El caso es que decidí calzarme los clavos, aunque cortos, a pesar de los riesgos que ello conlleva. Y estos riesgos suelen ser las secuelas que deja el hacer 10 km. con tales herraduras. El lunes con las patas cuadrás, el martes algo menos y el miércoles ya casi recuperado anque muscularmente tocado.

Pero a jueves (hoy) todavía tengo un intenso dolor en la planta del pie izquierdo a la altura del talón (lo que viene a ser el calcañar, que decía mi abuela). Cuando me levanto por las mañanas el dolor casi no me permite apoyar el pie. Luego según va pasando el día y se va calentando el dolor es soportable pero no deja de ser muy molesto. Cada vez que me levanto de la silla los primeros pasos los hago cojeando. Esto me ha impedido hacer algo de calidad estos días, aunque al menos he podido trotar algo, aunque con dolor.

Todo esto que os cuento es lo lógico ya que no me ponía los clavos desde el verano y para una vez que me los calzo, burro de mí, lo hago para meterme 10 km. y pico. En fin, espero que vaya pasándose y que el domingo, que corro un milqui y quería hacerlo en condiciones, pueda ponérmelos.