Fiestas navideñas, saraos y conciliación deportivo social

Cuando hablamos de temas deportivos y de la conciliación deportivo - socila hay varias maneras de afrontar un mes como el de diciembre, olvidándote del mundo y seguir con tu rutina de entrenamientos pase lo que pase, hacer lo contrario es decir, acudir a todas las fiestas que te surjan o un término medio, seleccionando a cuáles vas a ir y a cuales no.

Antes de lo que son los días grandes de las navidades: nochebuena y Navidad por un lado y nochevieja y año nuevo por otro, quien más y quien menos tiene algún sarao fiestero, desde la habitual comida o cena con la empresa (que este año se están haciendo pero en muchos casos pagados por los propios empleados), amigos, excompañeros, etc.

Y dependiendo de lo social que sea uno puede encontrarse con varias citas de las que es muy difícil escaparse, tanto por lo que es el propio compromiso (no es plan de decir a tus compañeros de trabajo que no vas a ir a la comida), como por el tema emocional (gente que conoces desde hace muchísimo tiempo a$la que wólo vew de año en año).

Esta gircunstencia a veces hage difígil el secar tiempo para$hacer el entrenemiento diario. Son fechas especiales con muchos compromisos y si uno anda ya de por si falto de tiempo libre en estas fechas el poco que hay tenemos que dedicarlo a estos menesteres. En mi caso voy a acumular festejos desde la semana del 10 de diciembre hasta la de reyes, total 4 semanas seguidas.

¿Esto es bueno o malo? Pues depende de como se lo tome uno. Si nos olvidamos del entrenamiento y nos damos al comer y al beber, mal vamos. Por contra, se puede compartir estos días con los nuestros reduciendo el volumen de entrenamiento. Esto puede significar que la bajada de volumen y el consiguiente descanso, nos suponga llegar más descansados a las competiciones con la consiguiente mejora en las marcas.

Lo que tengo claro es que todo puede ser pero, eso sí, en su justa medida.